El coronavirus, ¿nos iguala a todos?
¿Cuál debería ser el camino correcto para poder transitar la cuarentena en la villa? En donde el hacinamiento, la falta de servicios básicos, la gran cantidad de población, y el trabajo en negro, son denominadores comunes…..¿como se hace cuarentena cuando se vive al dia?
Por Dalma Villalba
Muchos son los que afirman que esta virus, extraño, invisible, y que está aterrando a todo el planeta, nos iguala, que no conoce de la clases sociales. Y quizás, sea verdad. Pero lo que también es verdad que ninguno de los cuarenta millones de argentinos, estamos preparados para este cambio cultural que estamos viviendo, que la Pandemia, tampoco distinguió a los países del “primer, segundo o tercer mundo”, la única diferencia que se pudo marcar, fueron las medidas que tomaron los Gobiernos, “los populistas” y los “no populistas”, los que ya no saben dónde enterrar los cuerpos, y los que están intentando que el virus, este enemigo invisible, como muchos lo supieron definir, se retrase lo más posible de propagarse y no nos deje en un Estado de Guerra.
Con respecto a la Argentina, aplaudimos, y abrazamos las medidas que tomo el Presidente Alberto Fernandez, que se puso al hombro esta Argentina que estaba librando sus propias batallas, y ahora lo esta haciendo en un contexto muy complicado, tanto o más complicado que tratar de que el virus se propague en un villa de emergencia, de la Cuidad, o de cualquier parte del país.
¿Cuál debería ser el camino correcto para poder transitar la cuarentena en la villa? En donde el hacinamiento, la falta de servicios básicos, la gran cantidad de población, y el trabajo en negro, son denominadores comunes…..¿como se hace cuarentena cuando se vive al dia? ¿Cómo se hace cuarentena en una casa con 2, 3, 4 , 5 o 6, niños?, ¿Cómo no salir a la calle, cuando a veces la calle es lo único que hay? ¿Cómo se vive en “aislamiento” cuando a veces no hay ni división de habitaciones?, ¿Cómo se quedan en sus casas los hijos, o hermanos adictos a la merca, que no bancan la abstinencia?, ¿Cómo se vive en cuarentena con un marido borracho y violento? ¿Cómo se duerme cuando la visita al hospital o al penal, se ven postergadas?, ¿Cómo nos quedamos en casa, si no hay casa?.
No es un reclamo, no es dar lastima, solo trato de mostrar la otra cara de la cuarentena, una cuarentena, que pareciera que no sirve, porque pareciera que no pasa nada. Muchas veces ni el hambre, ni la lluvia, ni los tiros, hacen que nos quedemos en casa, mucho menos algo que no se ve. Y que pareciera que no existe, pero eso es solo una ilusión.
El coronavirus existe, los muertos están por ahí tirados, las familias quedan destrozadas, los gobernantes están tratando de dar respuestas, pero como siempre, los más pobres, son los más perjudicados, porque nunca hubo respuestas, ni con los vientos a favor, ni con los vientos en contra, la situación realmente cada vez se va a tornar insostenible.
Estos días en la Villa 21 de Barracas y 31 de Retiro, se vivió unos días “normales”, y esto no significa que todos los habitantes de respectivas villas sean unos irresponsables, sino que la cantidad de población es tanta, entre 60.000 a 70.000 aproximadamente en cada una de ellas, que unos cuantos no hacemos la diferencia. Pero si alguno muere, los familiares y amigos, si notaran esa ausencia.
Ojala se tomen medidas a favor de los que menos herramientas tienen para vivir una situación asi, ojala que los vecinos tomemos conciencia. No solo me cuido yo, sino que al cuidarme, también cuido al que tengo al lado.
Tratemos de quedarnos en alguna casa. Y si tenes, quédate en tu casa.